El famoso Gaixample de Barcelona
Seguro que todos los barceloneses, catalanes, una gran cantidad de españoles y no pocos menos extranjeros, sean homosexuales o no, han oído hablar del más famoso barrio gay de Barcelona: el Eixample Esquerra. Si por casualidad no te suena, quizá lo conozcas por su nombre «artístico», el Gaixample, mezcla de la palabra gay y de su nombre de pila, cuna del Circuit Festival, del que disfrutaremos en la primera quincena de agosto (y del que hablaremos más adelante).
El Eixample es un barrio céntrico de Barcelona, y su nombre traducido literalmente significa extensión, ya que es exactamente lo que es: una extensión del centro original de la ciudad por su margen izquierdo (de ahí lo de «esquerra» también). Pero hoy en día, se ha convertido en un centro neurálgico del lugar, con lugares emblemáticos como la Casa Golferichs, el Parc de Joan Miró y el edificio histórico de la Universidad de Barcelona. También puede encontrar dos populares mercados de comida, El Mercat Sant Antoni y El Mercat del Ninot.; estos mercados son muy apreciados por los catalanes que hacen sus compras diarias allí.
Estos mercados tradicionales ofrecen muchos puestos diferentes, desde comestibles, carnes y pescados hasta artículos para el hogar, ropa, lencería, bolsos, regalos y chucherías. Los domingos, la venta libros de segunda mano y sellos para coleccionistas cautivan a los visitantes del histórico Mercat de Sant Antoni, que conserva la arquitectura, la vitalidad y el encanto de sus orígenes. Estos lugares dan vitalidad e inyectan vida en el Eixample Esquerra.
Y bueno, sin saber muy bien cómo, hay una zona en este barrio donde la comunidad homosexual empezó a establecerse hace unos años, y ha acabado por darle verdadera identidad. Con su colección de bares, restaurantes y clubes nocturnos, y sus edificios decorados con banderas arcoiris, uno ya sabe lo que va a encontrarse si visita este lugar, y es que incluso se modificó su nombre, como ya he dicho, hasta ser conocido como Gaixample; conocido en todo el mundo, es un ejemplo de barrio libre y tolerante, aunque quizá su marcado acento gay sea demasiado, o no, uno nunca puede estar seguro de eso.